El valor de los implantes, endodoncias y otros tratamientos disponibles en cualquier clinica dental Compostela es indiscutible desde una perspectiva de estética y bienestar oral. Pero la actividad de los odontólogos es importante en sí misma por su impacto en la investigación dental y en la salud pública.
Esta rama de la medicina, dedicada al estudio, diagnóstico y tratamiento de enfermedades y dolencias dentales, se ha desarrollado a la par que las sociedades. Así, los primeros en desempeñar estas prácticas fueron los médicos egipcios antes del nacimiento de Cristo.
Estos profesionales, mal llamados sacamuelas, se involucran en la investigación de problemas dentales, incluso en aquellos derivados de dolencias ajenas al sistema dentario. Por ejemplo, el mal aliento, la gingivitis o las infecciones persistentes en el tiempo pueden estar relacionadas con la diabetes. En este y otros casos, las pruebas diagnósticas del dentista llegan a ser claves para la salud general del paciente.
En un sentido amplio, las evaluaciones odontológicas salvan vidas, pues ayudan a detectar tempranamente males tan graves como el cáncer o las enfermedades cardíacas. De ahí que los chequeos anuales no deban entenderse como un simple trámite para mantener la sonrisa: realmente pueden evitar el desarrollo de dolencias mortales.
Aunque menos alabada, la labor pedagógica de los odontólogos también es valiosa para una sociedad donde el azúcar, el alcohol o la nicotina circulan tan libremente, pese a ser perjudiciales para una dentadura sana.
Los dentistas educan a sus clientes y les instruyen en el seguimiento de hábitos saludables, sin mencionar las técnicas de higiene dental. Porque a todos, a temprana edad, se les enseña a utilizar el cepillo, pero pocos complementan esta herramienta con el uso de colutorios e hilos dentales, los únicos capaces de eliminar el cien por cien de la placa y los residuos orgánicos.