¿Cómo moverse por la ría de Vigo?

La ría de Vigo es uno de los enclaves más destacados para el turismo marinero nacional. Sin embargo, la complicada movilidad por tierra y mar disuade a una parte de los viajeros. En realidad, no faltan medios de transporte que comuniquen los territorios insulares con la isla madre, ni compañías navieras que fleten barcos a diario, facilitando además la reserva física y telemática de billetes. Un claro ejemplo es la taquilla mar de ons vigo.

Por su proximidad con el Parque Nacional de las Islas Atlánticas, la ría de Vigo cuenta con infinidad de destinos de interés, como el Cabo Home, Baiona, el Cabo Silleiro o la playa de Rodas. Como algunos de ellos no inaccesibles por medios terrestres, la única opción es reservar un pasaje en las navieras privadas que desarrollan su actividad en esta zona de las Rías Baixas.

La flexibilidad horaria y los precios asequibles son factores clave a la hora de elegir una compañía naviera. Mar de Ons cumple estos requisitos, siendo por descontado una empresa de prestigio que dispone de numerosas líneas entre los puertos de Vigo y Cangas, Sanxenxo, Portonovo o Baiona, entre otros.

Para los viajeros románticos, una alternativa es el transporte de ría, un servicio que enlaza las distintas villas y localidades marineras de la ría de Vigo desde el siglo XVIII. Sus barcos de este transporte regular parten cada treinta minutos, y sus travesías son una experiencia agradable, si bien carecen del confort de los yates y veleros privados, como es natural.

Cualquiera de estos medios de transporte invita a explorar las playas, calas, islas y villas del litoral gallego, en una experiencia memorable que entusiasma a viajeros de todas las edades. El coste del pasaje a bordo del transporte de ría no es excesivo, por lo que grandes y pequeños ahorradores podrán disfrutarlo.

¿Sigue siendo Cíes ese paraíso del que hablan?

Las Islas Cíes han sido consideradas durante muchos años un paraíso natural por el que parece que no pasara el tiempo. Muchas personas que habían acudido a las Cíes en la década de los setenta y regresaron en los ochenta o en los noventa, dicen que prácticamente nada ha cambiado, salvo que ahora hay normas para entrar y no se permite la acampada libre. Esto ha hecho que las islas estén más cuidadas, más limpias y controladas, por lo que los escasos cambios que se pueden ver, han sido para mejor. 

Si coges el barco baiona cies para disfrutar un día en las islas, te encontrarás con un paisaje prácticamente virgen. Aunque son muchas las personas que visitas las Cíes cada año, especialmente en verano, no te vas a encontrar con el típico paisaje de zona turística en el que bares y hoteles son los protagonistas. Por el contrario, en Cíes no hay hoteles. Tan solo un camping para quienes quieren pasar la noche durante el verano. El resto del año ni tan siquiera funcionan las instalaciones.

Todo esto puede ser un poco incómodo para quienes quieren ir y se han acordado a última hora, porque al tener un número de visitantes tope al día, tal vez ya no sea posible cumplir con el objetivo. Pero a cambio ha permitido que el espacio del parque de las Islas Atlánticas conserve toda su magia y que siga igual de bonito que siempre. Incluso mejor, precisamente por los límites que se han puesto al turismo.

De no haberse tomado medidas, seguramente hoy las Cíes serían algo muy diferente. Ya en los ochenta comenzaron a verse los problemas porque la gente iba a acampar por libre y lo hacían sin tener en cuenta los espacios de las aves que allí anidan. Y en muchos casos dejaban la basura tirada sin ningún tipo de cuidado, haciendo que todo comenzara a verse descuidado. El riesgo de que las Cíes perdieran su magia era grande. Pero, por suerte, se actuó a tiempo y podemos afirmar que hoy continúan siendo ese lugar paradisíaco al que acudir para estar inmersos en la naturaleza.

Durante el verano y aun con límite de visitas, las Cíes cuentan con muchos visitantes y como la mayoría se concentran en la playa puede parecer algo abarrotada. Pero si se acude en primavera o en otoño, cuando el tiempo todavía es suave y permite pasear por las diferentes rutas de senderismo, la impresión será diferente.

Todo desde el móvil 

Siempre me he resistido a los últimos avances tecnológicos, un poco por protegerme de tantos avances de dudosa utilidad y otro por cuestiones económicas: en la mayor parte de los casos, el progreso también supone inversiones extra. Pero es cierto que una buena gestión de las nuevas tecnologías puede conseguir justamente lo contrario, ahorrar dinero. 

Esta paradoja se explica por los diferentes usos (y obligaciones) a los que nos somete la tecnología. Es fácil poner un ejemplo de cuándo “estar al día” con la tecnología puede suponer un gasto extra: cuando compramos el último móvil de tal o cual marca por puro capricho cuando el teléfono que tenemos es perfectamente válido y aún nos da un servicio más que suficiente. 

Pero, por otro lado, un buen uso de la tecnología es evidente que nos ofrece la posibilidad de ahorrar unos euros, como hago yo, por ejemplo, con los viajes. Una simple reserva barco islas cies supone un ahorro de tiempo muy importante si se hace desde el móvil. Y ya sabemos que el tiempo es dinero. Por supuesto, las nuevas generaciones no se plantean hacer todo más que desde el móvil, pero los que no somos nativos digitales nos ha costado algo más adaptarnos.

Seguro que la mayoría no recuerdan cómo se compraba antes un billete de avión, antes de internet, claro. Ahora todos hacemos más o menos lo mismo. Nos vamos a uno de esos comparadores de precios de vuelos baratos y buscamos lo que nos interesa hasta que encontramos el precio más barato. Desde luego que no es oro todo lo que reluce porque a veces un precio que parecía una ganga se empieza a hinchar cuando aparecen los extras. Pero es cuestión de saber buscar y no caer en trampas para principiantes.

Pero, de cualquier forma, el móvil es un instrumento básico para cualquier viajero. Una reserva barco islas cíes es solo una de las múltiples tareas viajeras que he hecho desde el móvil para preparar mi último viaje a Galicia: desde obtener la autorización para visitar las islas, hasta reservar camping o alquilar una bicicleta. Y siempre chequeando los precios para ahorrar unos euros.

Las rías baixas en Barco

La naviera Mar de Ons abrió en junio  la ruta Pontevedra – Illa de Ons. Este puerto conecta con los de Bueu, Sanxenxo, Portonovo, Combarro y Vigo como punto de embarque para viajar a este enclave paradisíaco del Parque Nacional de las Islas Atlánticas.

 

A partir de ese fin de semana, los interesados ​​podrán realizar sus viajes Illa de ons todos los sábados, domingos y festivos de julio y agosto. La salida desde el puerto de Pontevedra (en As Corbaceiras) es a las 10:45 horas y el regreso es a las 19:00 horas.

 

Silvia Torres, directora comercial de Mar de Ons, ha comentado que “la naviera ya ha organizado viajes para grupos bajo petición desde este puerto de Pontevedra, pero su éxito, realizado en septiembre del año pasado, nos animó a continuar estos viajes. organizados todos los fines de semana del verano ”.

 

Se ofrecerán salidas diarias desde el puerto de Bueu desde este sábado 26 de junio hasta septiembre. Las salidas desde la localidad de Buenense hacia Ons son a las 10.15, 23.45 y 19.00 horas. y los horarios de regreso de Ons se realizan a las 18.15 h. y 19.40 p. m.

 

Los viajes desde Sanxenxo y Portonovo comenzaron el primer fin de semana de junio y se operan a diario desde el pasado sábado. También partieron desde el puerto de Vigo los fines de semana de junio y lo harán todos los días durante los próximos días.

 

La naviera, que recuerda que Ons tiene una cuota diaria de 1.300 visitantes, asegura que ofrecerá este servicio de transporte a la isla siempre que las condiciones meteorológicas lo permitan.

En Galicia, hay auténticos paraísos

Galicia tiene una gran variedad de lugares naturales. Sus zonas montañosas cuentan con parajes tan bonitos y llamativos como son los Ancares, en los que parece que el tiempo se haya detenido hace muchas décadas y encontramos pueblos enteros en los que prácticamente no vive nadie, con naturaleza salvaje todo alrededor.

También en montaña encontramos otros paisajes dignos de mención, como son los cañones del Sil. Este lugar, en el que el protagonismo se reparte por igual entre la vid y los monasterios, da para muchas visitas y para realizar muchas rutas tanto a pie como por carretera. Eso sí, no es apto para aprensivos ya que las estrechas carreteras que transcurre por los cañones pueden causar más de un ataque de vértigo.

Las termas naturales que se encuentran en la ciudad de Ourense o en la provincia de Pontevedra son también dignas de disfrutar. El agua caliente es todavía más atractiva en invierno, cuando el frío es intenso y contrasta intensamente con el calor y la agradable sensación que ofrecen las aguas termales.

Pero además del monte, Galicia también tiene bellísimas playas. La zona conocida como Rías Altas es menos turística y el tiempo es algo más inestable, pero a cambio ofrece playas que en muchas zonas son prácticamente vírgenes y que no tienen viviendas cerca, ni siquiera chiringuitos, por lo que la tranquilidad es total. Si se baja a la zona de Rías Baixas, encontramos mejor tiempo y playas que parecen sacadas de postales, con grandes arenales y una gran estructura turística con todos los servicios.

Pero también encontramos playas en las islas, como por ejemplo en las Cíes y también encontramos en la isla de ons playas muy bellas. Dado que ambos lugares tienen restringida la entrada, especialmente las Cíes, estas playas se encuentran perfectamente conservadas y tienen todo el encanto de un lugar en el que la contaminación tiene prohibida su entrada.

Las playas fluviales y los bosques completan la gran oferta natural de Galicia, todo un paraíso para los amantes de la naturaleza y para quienes buscan unas vacaciones relajantes, diferentes y en las que la clave sea ver lugares únicos y disfrutar de una gastronomía maravillosa. La gran oferta tanto de hoteles clásicos como de alojamientos rurales así como campings y bungalows, permite que todo el mundo encuentre el tipo de establecimiento que cumple con sus necesidades.

MEJOR EN BARCO QUE EN COCHE

Mucha gente hace muy bien en coger al barco que hace la ruta cangas vigo, porque así se ahorran las caravanas que hay siempre tanto para ir a trabajar como al volver de trabajar. Si van a venir a trabajar a Vigo es lo que más les compensa porque tarda bastante menos que si hacen el trayecto en coche y el billete del barco es muy económico, solamente te tienen que coincidir bien los horarios de los barcos y los horarios del trabajo. Personalmente conozco a bastante gente que viene a trabajar a Vigo todos los días en barco y ellos mismos son los que me reconocen que prefieren venir a trabajar en barco porque gastan menos dinero y no tienen que preocuparse de buscar aparcamiento en la ciudad, algo que es realmente difícil en algunas zonas por las pocas plazas de aparcamientos que hay.

Lo peor de venir a trabajar en barco es en invierno cuando el mar está un poco embravecido y los que no están acostumbrados a ir en barco lo pueden pasar un poco mal ya que el barco se puede menear bastante y marear a los pasajeros. Por fortuna a mi nunca me ha tocado ir en barco ningún día con el mar en mal estado para navegar, pero me encanta ir en barco y cada vez estoy más habituado a navegar, ya que todos los veranos desde hace unos años salimos todos los días a navegar y a pescar desde el barco de uno de mis mejores amigos.

Viviendo al lado del océano atlántico nos parecía mal no aprovecharnos de ello y disponer de un barco pequeño para nuestro disfrute, tardamos años en poder encontrar un barco pequeño que pudiésemos mantener nosotros mismos, ya que somos nosotros los que le hacemos todas las reparaciones que sean necesarias para que el barco esté disponible cada año. Ahora solo nos falta conseguir un remolque para poder meter y sacar el barco cuando a nosotros nos venga bien sin tener que gastarnos un duro, pero por ahora no hemos encontrado uno que nos valga y nos compense el precio.