¿Por qué poner tu hogar en manos de un decorador?

Si nos preguntan por el perfil de las personas que contratan los servicios de un experto en decoracion en vigo lo primero que se suele venir a la cabeza es una casa lujosa, incluso una mansión. Como la casa de futbolistas famosos, cantantes o actores o actrices. Pero lo cierto es que no es así en absoluto. Hay muchas personas que contratan decoradores e incluso algunos arquitectos realizan también este tipo de trabajos.

Uno de los ejemplos más comunes es el de la persona que monta un negocio, como un restaurante o un local de copas y contrata a una empresa de reformas integrales. Estos suelen ofrecer también el servicio de decoradores para darle al local un aire con fuerte personalidad y diferente del resto de establecimientos. Además, se tiene en cuenta el tipo de público al que va a ir dirigido el establecimiento y el propio gusto personal del propietario. Y no se trata solo de locales de alto nivel. Una cafetería moderna y bonita seguramente tiene el toque de un decorador experto detrás.

Y exactamente lo mismo puede suceder en tu vivienda. Hemos dicho que hay arquitectos que son expertos en decoración y también decoradores propiamente dichos. La diferencia entre unos y otros suele estar en el tipo de trabajo que se realiza. Por lo general, no siempre es así, el arquitecto no solo se ocupa de buscar un tipo de decoración concreto, sino que sobre todo se centra en la distribución del espacio durante una reforma integral. En función de las necesidades del propietario pero también de las modas y de la belleza estética, puede buscar la manera de abrir espacios para conseguir integrar cocina, isla, comedor y salón en un único y gran espacio principal de la vivienda. Escogerá también los materiales que se van a utilizar para la reforma y los resultados serán muy notorios.

En el caso de un decorador, su toque también se va a notar y mucho, pero suelen trabajar exclusivamente en la decoración de un piso que ya ha sido reformado. Como mucho, ayudarán a elegir colores para las paredes, papeles o tipos de suelo. No cambiarán las partes permanentes del piso, pero sí que escogerán muebles, alfombras, cortinas y todos los elementos que le darán el carácter propio a la vivienda.

Lo más importante es que siempre lo harán teniendo en cuenta dos factores clave: el presupuesto y el gusto del cliente, por lo que el éxito está más que asegurado.