¿Qué tengo que hacer si me despiden de manera indebida?

Hay razones de peso para despedir a un trabajador que pocas veces se vienen abajo en un juicio. Pero también hay muchas empresas que optan por despedir a una persona por motivos que no son del todo claros o demostrables.

Un trabajador que se niega a realizar horas extras que no tiene obligación de trabajar; una persona que tal vez no es muy simpática pero que realiza su trabajo sin ningún tipo de problemas; la llegada de alguien a quién un jefe quiere contratar pero que no hay plaza libre para que ocupe; una baja por enfermedad… estos son algunos de los motivos por los que alguien puede acabar en la calle y que podrían constituir un despido improcedente.

Cuando un trabajador es despedido por sorpresa, recibe una carta de aviso que seguramente le pidan que firme. Todo lo que le den a firmar y deba de recoger en el momento, debe de firmarlo con un “no conforme” al lado. Esto deja constancia de que la persona recibe la información, pero no necesariamente está de acuerdo con la misma y su firma solo significa que la está recogiendo, no que la acepte.

En el caso de que el trabajador no firme estaría tirando piedras contra su propio tejado ya que no aceptaría el despido, pero tampoco podría tener acceso al cobro de la prestación por desempleo, por lo que la recomendación de los abogados es que se firme siempre con un no conforme.

Tras eso, debe de llevar toda esta documentación a un despacho de especialistas en derecho laboral vigo junto con su contrato y cualquier otro papel que considere relevante. Allí, le darán una cita para hablar con uno de los profesionales que le dirá si su despido es susceptible de ser denunciado por improcedente y los pasos que se tienen que dar a continuación.

Lo normal en el caso de un despido improcedente es que el trabajador presente, en primer lugar, la reclamación ante el servicio de arbitraje y conciliación. El arbitraje solo se puede llevar a cabo si ambas partes están conformes y se comprometen a acatar lo que allí se decida. En caso contrario, se puede recurrir a la vía judicial.

Si el trabajador gana la denuncia puede ser readmitido en la empresa o puede ser indemnizado. El dinero a percibir en caso de despido improcedente dependerá de la antigüedad del contrato y actualmente está fijada en 33 días por año trabajado con un máximo de 24 mensualidades.