Ha llegado el momento de elegir una especialidad tras terminar la carrera, una de las elecciones más importantes en la vida de un futuro médico. Aunque muchos de los que me conocen dirán que lo tengo más fácil porque varios miembros de mi familia están vinculados a la dermatología, pero la realidad es que yo no lo tengo tan claro. Siempre es una opción, pero antes me gustaría valorar otras alternativas.
Lo que sí está claro es que han sido años muy especiales, pero también muy duros. Todo el mundo sabe lo que cuesta sacar la carrera de Medicina. Por mucho que te lo digan antes de empezar, no te das cuenta de lo exigente que es hasta que pasan un par de meses. Y eso que, en mi familia, como digo, hay varios Especialistas dermatologia medica quirurgica en Vigo. Me dieron todos los ánimos y consejos posibles antes de enrolarme en esta carrera, pero tras dos meses recuerdo que me vi abrumada. Y sé que a otros compañeros les pasó lo mismo.
Una vez que empiezas, hay como una suerte de ‘subidón’ de lograr entrar en una carrera tan especial como esta, con tanta vertiente social, como se ha visto durante los peores momentos de la pandemia. Pero unas semanas más tarde, cuando compruebas todo lo que te espera a nivel de esfuerzo y estudio, te agobias. Y que, al terminar la carrera, todavía no ha terminado todo, sino que llega el temido MIR. Es como una presión que llega agotar. Pero al final, esta carrera, como cualquier otra, entiendo, es un maratón, una carrera de larga distancia en la que pasas momentos mejores y peores.
Una vez pasada la primera parte de esta ‘carrera de fondo’ llega el momento de elegir especialidad. La primera opción es seguir la tradición familiar teniendo en cuenta que vengo de una ‘saga’ de Especialistas dermatología médica quirúrgica en Vigo, pero también estoy valorando otras opciones, aunque también dependerá de la nota. Lo que tengo claro es que quiero acertar en mi elección ya que no me gustaría tener que dar marcha atrás, que siempre es un engorro.